Informe de Valentina Cortés.
Pese al trabajo adelantado por la alcaldía de Ibagué y la gobernación del Tolima entregando ayudas para la población vulnerable, habitantes de distintos sectores de Ibagué sostienen que aún no las han recibido y que ya no saben qué hacer porque no tienen qué comer.
Con trapos rojos en las ventanas y puertas, familias del barrio como San Antonio ubicado en el sector de Ambalá, piden a los gobiernos local y seccional que los kits lleguen hasta allí donde la mayor parte de la población está conformada por niños y adultos mayores.
Adriana Zambrano, residente del sector, le dijo a Revista Asuservicio que algunos funcionarios visitaron los barrios Oasis y Obrero para entregar los mercados, pero que a San Antonio no llegaron y tampoco volvieron “A los de la calle 56 y 57 no nos han traído nada” dijo la ciudadana.
Por su parte, habitantes de la vereda Ancón Tesorito en el barrio Clarita Botero sostienen que están desesperados por la situación que sus niños y abuelos están pasando, pues literalmente no tienen que “echar a la olla” y tampoco han recibido las ayudas del gobierno.
A la queja que presentan estas comunidades se suman los altos costos en los recibos de la energía, pues dicen que por este servicio pagan en promedio 30 mil pesos mensual y según el último recibo varios pobladores deben cancelar más de 70 mil pesos.